Aunque la revolución contra las etiquetas de género es una realidad, cuando figuras como la de Rain Dove aparecen en escena, la pregunta “¿Es un chico o una chica?” continúa surgiendo. Su rostro es muy conocido en los Estados Unidos gracias a las redes sociales y ha conseguido que su activismo en pro de la igualdad, independientemente del género o la orientación sexual haya llegado a cientos de personas.

Antes de llegar a las pasarelas fue bombero y mujer de negocios. Las casualidades la llevaron a debutar en un desfile masculino para Calvin Klein (la firma que minutos después le pagó 250 dólares para que no asistiese a su fiesta privada). Rain Dove está acostumbrada a que la confundan, vive con ello y se siente orgullosa. Ha criticado a Victoria’s Secret por promover un modelo de belleza femenino demasiado restringido y ha contado su experiencia personal en diversos programas televisivos. Responder a preguntas no entra dentro de su concepción de problema.

‘Andrógina’ es la palabra que se usa para describirte. ¿Te sientes cómoda con ella?

Andrógino es una manera que tienen los humanos de etiquetar a otros humanos que, a primera vista, parecen ser ambiguos sexualmente. No me siento cómoda con la palabra porque no creo que sea ajustada, ya que tener aspecto masculino o femenino es algo basado en los estándares propios de cualquier sociedad, desde la longitud del pelo hasta la altura o la musculatura.

Hoy en día ¿Los modelos andróginos resultan más atractivos para las marcas?

No creo que las marcas se sientan atraídas por lo andrógino. A la gente le gusta la ambigüedad porque lo ven entretenido y poderoso. Pero muchas marcas usan a modelos andróginos para demostrar que son progresistas, no para decir que está bien salirse de las pautas de género binario que hay marcadas. Pero creo que eso irá cambiado a medida que el mundo vaya explorando las posibilidades de cómo definir a los seres.

Fuente: Vanguardia, Diverso Ecuador